martes, 14 de diciembre de 2010

Rojo como...

tus labios que me agradaban comerlos lentamente.
Rojo como...
el mas halla de lo inevitable
y mas cerca de tropezarme,
una sonrisa
infalible,
una mano y una
bendición,
para acostarme...
y un poco mas lejos del camino,
cuando el insomnio llega atormentarme,
y un poco mas cerca... si pudiera.
Si tan solo pudiera,
confesarte...
Que me muero por un bocado de tus...

En lo mas halla de lo incoformable la escucho decirme
....Silencio yo me muero por tus labios que me queman la sangre.
por tus mordidas en mi cuello, en mis muslos,
en mis pechos y esa forma salvaje
que despiertas en mi...

No quiero seguir oyendo tu voz aclamándome.
Aquí todos los días son las 4 am.
Aya cual es la hora...?

Y te recuerdo desde parís y no estas aya por cierto, pero no ahí otro lugar mas hermoso donde pueda recordarte mejor que estar halla en lo alto y lejos de mis manos, de tu voz incansable que se repite día y noche sin parar en mi corazón entorpecido.

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